Hasta finales del siglo XVII la isla de Menorca contaba como "grandes" vías comunicativas dos caminos por los cuales a duras penas pasaba un carruaje pequeño, eran los llamados Caminos Reales del Norte y del Sur de Menorca que comunicaban aún algunos pocos y pequeños pueblos menorquines.
Con la llegada del convulso siglo XVIII fondean y conquistan Menorca las tropas inglesas, que se disputan, juntamente con franceses y españoles, el dominio del mar Mediterraneo a través de esta isla, e intercambian sus conquistadas tierras como si de un juego de cromos se tratara.
El gobernador inglés Richard Kane llega a Menorca con la idea de hacer de la isla un auténtico fortín. Dota a Menorca de una cierta autonomia, en un principio respeta la idiosincrasia y la manera de hacer de la gente de este pequeño paraiso pero pronto se mete en problemas cuando se topa con la religión. Problemático es el cambio de la capital administrativa que pasa a la ciudad de Maó en detrimento de la bella e histórica Ciutadella. Lo mismo pasa con el proyecto de hacer una vía comunicativa más rápida que cruce de punta a punta la isla por la parte central, partiendo desde el gran castillo de San Felipe al este hasta llegar a la ciudad de Ciutadella yendo hacia el oeste de la isla... mover las tropas y todo su arsenal militar de forma ágil era lo que movía a Kane a promover su proyecto, esto y que la gente también tuviera una carretera más acorde con los tiempos modernos que les tocaba vivir, una gente demasiado conformista y conformada con lo que tenía, que no veía necesario este cambio y esta transformación viaria, y menos aún cuando la financiación y su mantenimiento recaía sobre sus propios y pobres fondos monetarios.
El Pleno le da el visto bueno por unanimidad al inventario municipal de caminos en el que lleva años trabajando
Tras varios años de trabajo, el Pleno del Ayuntamiento de Córdoba aprobó ayer por unanimidad el inventario municipal de caminos públicos. En total, el inventario protege un total de 104 caminos de titularidad municipal que cruzan todo el término de Córdoba, uno de los más extensos de España.
El Ayuntamiento de Santa Ana la Real (Huelva) ha celebrado recientemente una reunión muy importante por lo que puede suponer para su patrimonio público y nuestro entorno natural. Como nos confirma su alcalde, José Antonio Ramos, “asistía a este encuentro histórico Reyes Muñiz, registradora de la Propiedad de Aracena, Mario Aguilera, gerente del catastro de Huelva, el secretario del Ayuntamiento, Francisco Vaca, el técnico municipal, Israel López, y yo mismo para poner de acuerdo a las entidades que tienen que intervenir en este proceso y que conllevará a que el municipio tenga registrado los bienes de titularidad pública”.
El Ayuntamiento de Santa Ana la Real inicia el procedimiento para la inscripción de los caminos públicos en el Registro de la Propiedad
Después de un largo recorrido, se inicia el procedimiento para la inscripción de los caminos públicos del municipio en el Registro de la Propiedad lo que, además de dar cumplimiento a la normativa vigente, reforzará la protección jurídica de estos bienes. De nuevo Santa Ana la Real tramita otra Iniciativa pionera en España.
Incluso desde antes de la constitución formal de la Sociedad Caminera, alguno socios fundadores iniciaron la defensa del camino del Pardillo que unió durante siglos Villanueva del Pardilo con Torrelodones a través del Molino de la Hoz. La primera constancia de su existencia se remonta al siglo XII, como paso vinculado a la aldea de Santa María del Retamar, fundada por madrileños en la primera mitad del siglo XII y habitada, por lo menos, hasta finales del siglo XIV.
Largo camino el de la Justicia, pero finalmente todas las Instancias Judiciales reconocen el carácter público del Camino del Pardillo.
Corría el año 2008 cuando presentamos las primeras denuncias ante el Ayuntamiento de entonces.
En septiembre del 2009 el Pleno municipal acordó iniciar el expediente de recuperación del dominio publico del camino, abriéndose al paso vecinal en noviembre del año siguiente. A partir de entonces se inicio una guerra legal que primero se abordo en los tribunales de lo contencioso administrativo de Madrid, resolviéndose en sentencia firme de mayo de 2012, del Juzgado nº 11 de lo contencioso reconociendo la validez de las actuaciones municipales y la recuperación de oficio del camino.
Versión en castellano, traducido por la PICP del Els inventaris municipals de camins: Decàleg per a l’elaboració publicado por l’Institut per al Desenvolupament de l’Alt Pirineu i Aran (IDAPA), elaborat pel geògraf Xavier Campillo y revisado por el autor.
1. Antecedentes y justificación
El crecimiento de la oferta y la demanda senderista está haciendo aflorar tensiones en el uso de los caminos y, finalmente, la necesidad determinar con rigor a quien corresponde la propiedad. En este sentido, los inventarios municipales de caminos, obligatorios de acuerdo con lo establecido en la Ley municipal y de régimen local y recoge su Reglamento, son la herramienta fundamental para la defensa de los caminos públicos. Sin embargo, muy pocos municipios disponen de ellos.1
En los últimos años, en el marco de las diferentes jornadas de caminos y senderismo organizadas por el Instituto para el Desarrollo y la Promoción del Alto Pirineo y Aran (IDAPA), el tema de los inventarios municipales de caminos ha surgido de manera recurrente, así como la necesidad de encontrar fórmulas para impulsar su elaboración, que compite lógicamente a los ayuntamientoss, y específicamente la demanda de un documento sintético que pueda dar respuesta a las Preguntas básicas sobre la elaboración de los inventarios municipales, de los beneficios y obligaciones que se derivan o los protocolos a seguir para aprobarlos.